blog de la Revista digital de cultura Archivos del Sur desde Buenos Aires - Argentina- Año 14- edición 176-diciembre de 2015 - Registro de la propiedad intelectual Nro. 5238207 Revista Archivos del Sur -La revista Archivos del Sur es propiedad de Araceli Isabel Otamendi Directora- Editora: Araceli Isabel Otamendi-La editora no se hace responsable de la opinión de los textos y notas firmadas
domingo, 19 de julio de 2015
Roberto Abad Jordán
no llamar a la noche sino a la noche misma
un poco de arena en el alma, una palabra que yo le debía al mar
suaves reminiscencias de la memoria caían de las rompientes
brota el agua de los significados un jarro de caliza contenía al mar
(c) Roberto Abad Jordan
Lima
Perú
Roberto Abad Jordan estudió psicología en la universidad Ricardo Palma y periodismo en la escuela de periodismo "Bausate y mesa".
Escribe regularmente para algunos blogs de España, Argentina, Chile y Perú.
Es colaborador del programa de radio "La boca ya tiene dientes", Buenos Aires.
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Roberto Abad Jordán
sábado, 11 de julio de 2015
José Respaldiza Rojas
MIS MÁQUINAS
Máquina de escribir que recibí de mi padre, fiel compañera amiga incomparable, me acompañaste, año tras año, en mis estudios universitarios.
Casi me olvido, en el periodismo me inicié contigo, por eso me pregunto qué pasó entre nosotros pues volteo a mirarte y tú ya no estás. Aún suenan en mis oídos tu monótono hablar, taca taca taca, y al cambio de renglón un avisador rin se dejaba oír.
Usabas una bufanda negra que siempre te compraba, hasta que apareció una bicolor, pero el rojo casi no te ponías.
Camarada de mil avatares discúlpame por insultarte cuando yo erraba al ponerte una letra equivocada, es que debía cambiar de hoja y escribir todo de nuevo, pues eso me daba cólera.
Hasta que de pronto apareció el Radex un papelito pequeño, pero manejable; uno de sus lados tenía una capa muy blanca, por ese lado lo colocabas encima del error y volvías a teclear la letra errada y zas desaparecía permitiendo escribir como si nada hubiera pasado.
Pero me estoy desviando del tema no sé cómo pude olvidarte si me eras tan útil, incluso al aparecer el sténcil seguías siendo gran escritora claro te quitabas la bufanda y así con el cuello desnudo trabajabas de lo más bien.
Debo confesar que coqueto cambié varios modelos, una Olivetti, otra Remington, grandota y pesada, una última Olympia y con una portátil te fui fiel hasta que te perdí. Me ayudaste no sólo con las tareas, ¿Recuerdas cuando te empeñé? Es que debía un dinerillo sin tener cómo saldarlo.
Un día cavilaba y cavilaba, cómo impedir que la puerta de mi cuarto se cerrara así que te usé de tranca, sin que protestaras en realidad ni si quiera refunfuñaste.
Creo que todo empezó cuando le eché el ojo a una hermana tuya mucho más joven y eléctrica, pero la que me encandiló fue una computadora XP recién llegada al mercado y me acostumbré a cambiarte cada cierto tiempo y hoy la nostalgia hace que te extrañe y te busqué en el baúl de los recuerdos.
(c) José Respaldiza Rojas
Lima
Perú
José Respaldiza Rojas (Lima 1940) Decano de la Facultad de Pedagogía de la Universidad Nacional e Educación (1991) catedrático principal, periodista, se ha especializado en literatura infantil. Es Magister en Ciencia de la Educación. Ha publicado La Maestra, Adivinanza, Las Fabulosas fábulas, Fabulario, Imayllanqui jitanllanqui mil adivinanzas quechuas, Las jitanjáforas en el mundo infantil. El Tangrama, Calcular con fantasía y otros más. Es miembro de APLIJ, CEDELIJ
Ganó el Premio Nacional de Promoción a la Lectura, en el nivel universitario. En 1997 la Biblioteca Nacional del Perú lo galardonó por su creatividad.
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jueves, 9 de julio de 2015
Vicky Chincarini
TÚNELES
Atravesé demasiados túneles.
Desde el primero,
el que me entregó al mundo,
un túnel fue la opción.
Ahora, cuando el tiempo
impone su balance
no sé si elegí la oscuridad precisa,
el recorrido apropiado
o el paso justo
al transitar esos espacios.
Siempre hubo esplendores,
voces, silencios y alaridos
que incitaban
la construcción de nuevos socavones
en la locura
de atravesar el tiempo con nuevas flechas.
Después, la costumbre fue ajando cada temblor
y al penetrarlos
no se aceleró el latido,
no tembló el músculo,
no se humedecieron las palmas de las manos
ni quedó en mis zapatos
una mínima muestra
que testimoniara tanto empeño.
Atravesé demasiados túneles:
los propios, los ajenos, los soñados.
Y aquí estoy,
entre el designio inicial
y la imagen gastada,
imaginando otras cavidades
pero a esta edad no puedo con
el barro,
se acabó el agua caliente
y tengo frío.
SIN TALISMANES
No tengo talismanes.
No tengo nada que apretado en un puño,
colgado al cuello o guardardo en un cajón,
conjuraré cualquier instante.
Nada ceñido en la materia y atreviéndose en formas
que la carne reconoce y la geometría define.
Nada que revele la transmutación
del pez en arena, del agua en aire, del gesto en cal.
Conservo el eco de la imprecisa palabra de un adiós,
el ondular de un boleto azul abandonado al viento,
la estampilla en un sobre transformado en barco
que escapó por una esquina de tormentas,
el dibujo de cierto perfil sobre la humedad de un vidrio,
una moneda de cobre de 1949
enterrada en el jardín de una casa que ya no es mía,
una frase escrita con pintura oscura
en una tapia sin enredadera,
una perdida servilleta de papel donde grabé soledades,
un amanecer de domingo
con la primera flor y el último abrazo.
Sólo tengo
esa memoria que destiñe y recrea
para que pueda ahora
balbucear retornos, ademanes o caricias
que flotan en un espacio cargado de otras formas
que aprieto en un puño,
cuelgo de mi cuello
o guardo en un cajón
cerrado siempre a otros ojos.
(c) Vicky Chincarini
San Miguel de Tucumán
Provincia de Tucumán
Argentina
Vicky Chincarini nació y vive en Tucumán. Ha publicado dos libros de poesía: "Íntima patria" y "los juegos". Ha sido, durante dos períodos, secretaria de la Sociedad Argentina de Escritores, S.A.D.E, Seccional Tucumán y secretaria cofundadora de la Asamblea de Escritores de su provincia. Desde 2003 coordina el Taller Literario de la Peña Cultural "El cardón" y Biblioteca Pública "Dr. Antonio Torres", institución con casi setenta años de permanencia en la cultura de la región.
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Vicky Chincarini
jueves, 2 de julio de 2015
Rodrigo Verdugo
MAYO A Singwan Chong li
Las campanas mezclan nuestra muerte:
Arena impune
SESENTAYSEISAVO ANUNCIO A Fernando Palenzuela
Mucho antes de que tuviéramos el insomnio de la luz
Tuvimos el despojo de nuestra propia sangre
Que al alba no alcanzo a saltar
Quedándose como una imploración sobre las abejas
Quedándose más tarde sobre el soplo del sol
Que nos hizo tener cinco cuerpos,
Cinco cuerpos que rebanaban la luna sobre las raíces,
Cinco cuerpos que carbonizaban lo felino de la noche.
Nadie se preparó para esta vastedad
La noche heredó la muerte
Y de todas las cosas heredamos solo sus muertes
Nunca he visto el día
Caos y padres aplastan mi elemento
El latido de mi sombra ocultó los torbellinos
No se lavó el espejo donde termina el mar
La nieve siguió violando lámparas hasta el desvanecimiento
No se lavaba el espejo después de esas horridas jornadas
Las anclas pincharon la noche
Cayó naftalina sobre las estaciones de trenes
Donde mis tías descubrieron que la noche estaba sobrepuesta
Eso probó tanta amargura bajo la tierra
Ese vértigo de madera que hay en lo recién nacido
Sobrepuesto está también en nosotros
El mensajero anochece en el cazador
Y el cazador amanece en el hijo
Sobrepuestos estamos en nosotros mismos,
Con este insomnio de la luz
Con este soplo del sol
Que nos hiciera tener cinco cuerpos
Cinco cuerpos se deben tener para entrar en los tajos del abismo
Cinco cuerpos que entran al mar
Ordenando la luz que tuvieron los ángeles durante el día
Este soplo del sol tuvo cinco cabezas al mirar por dentro esos tajos del abismo,
Que del fuego pasaron a la mujer
Y fue tanta la vigencia nívea de las lámparas violadas y los huesos
Que una estrella visitó la sangre, dejando todo intacto sobre el mundo
Mis cinco cuerpos, tenían conocimiento de lo sobrepuesto
Habían nacido, muerto, amado, dormido, sobre una precisión velada
Tal como el pájaro que no puede dormir porque le hacen escuchar su propio canto
Grabado por quienes el mismo canto de este pájaro no dejó dormir
No se dejaban engañaban cuando lavaban los espejos
Y al soplo del sol supieron como había sido todo
Así fue todo,
Al llegar a una esquina nos dimos cuenta
Que la noche quedó sobrepuesta
Un insomnio de luz empezó a desangrarnos
Todo era reflejo de raíces,
El despojo de la sangre quería saltar a esas raíces
Pero no eran ellas, eran solo un reflejo de raíces
Tal era la amargura bajo la tierra
Entonces llegaron los cinco cuerpos que el soplo del sol nos había hecho
Se prepararon para la vastedad
Hicieron lo que debían hacer
Rebanar la luna sobre las raíces,
Carbonizar lo felino de la noche
Lo recién nacido tuvo su vértigo de madera
Ahora sobre el soplo del sol quedó el despojo de mi sangre
Se quedó como una imploración sobre las abejas
Yo lavo un espejo, aquí donde termina el mar
Mientras pasan por mi lado, luces que me recuerdan mi destierro
Vengo y voy a lo sobrepuesto, con el mismo insomnio de la luz
Recuerdo como cazador y mensajero amanecían y anochecían
Unas tías que nunca tomaron el tren bajo la noche pinchada
Guardándose naftalina entremedio de las enaguas
No me dejo engañar por lo que parece intacto sobre el mundo
He de nacer y morir sobre una precisión velada
El latido con una precisión velada oculta los torbellinos
Los cincos cuerpos se desvanecerán como el soplo del sol sobre los tajos del abismo
No alcanzarán a saltar a las raíces.
(c) Rodrigo Verdugo
Santiago de Chile
Rodrigo Verdugo (Santiago de Chile, 1977). Poeta y Collagista. Coeditor y articulista de la Revista Derrame. Miembro del Grupo Surrealista Derrame. Su obra ha sido publicada en revistas y antologías chilenas y extranjeras siendo traducida parcialmente al: Ingles, Frances, Italiano, Portugués, Polaco, Árabe, Uzbeko, Rumano y Bùlgaro. En 2002 publica su primer libro: "Nudos Velados", (prologo de Roberto Yañez e ilustraciones de Aldo Alcota), Ed Derrame. Ha participado en exposiciones intenacionales de surrealismo en España, Portugal y Republica Checa. En 2014 publica su segundo libro "Ventanas Quebradas", (prólogo de Lorenzo Peirano) Olga Cartonera Ediciones.
David H. Bogado
Poesia I
Escupime, lameme,
visquiame, silenciame.
Faltame el respeto,
faltame de besos.
No me hables.
No me escuches.
No me mires
Si ignorame.
Si callame.
Si cegame.
Pero nunca dejes...
Nunca! dejes de amarme.
Poesia II
Quiero verte
desnuda
sin piel
sin mi
sin nadie.
Sin sentimientos
sin culpas.
Sólo verte,
mirarte
y quizás desearte.
(c) David H. Bogado
Valentín Alsina
Provincia de Buenos Aires
David H. Bogado nació el 14 de septiembre de 1986, oriundo de la ciudad de Buenos Aires, actualmente reside en el partido de Valentín Alsina de la misma. Luego de finalizar sus estudios secundarios en el Instituto Nueva Pompeya decidió incursionar en el mundo del teatro en el prestigioso Centro Cultural Rojas y luego en el reconocido teatro San Martín. Hoy en día continúa su formación como actor y dramaturgo en la escuela municipal de teatro de Lanus, además de encontrarse dando clases de arte dramático en centros culturales de la capital federal. Ha publicado su primer libro " Vida D.", con el que ha participado en diversos festivales y ha ganado como mejor poeta 2012.Sus últimos trabajos como actor han sido "Hamlet" adaptación de Gustavo Roca, "Tercero Incluido" de Eduardo Pavlovsky con dirección de Walter Arce. Como director y dramaturgo ha estrenado Insania.
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